MIEDO

“Librarse del miedo es como quitarse la ropa delante de alguien: a veces cuesta pero cuando empiezas sólo puedes seguir… y cuando lo haces te das cuenta de que el miedo ya no existe, ha desaparecido… como esa ropa que un día dejas de usar”

Cuando recorro España entera en busca de una amistad, un poco de compañía o la persona amada… no tengo miedo.
Cuando escucho lo que dice mi corazón y dejo atrás las apariencias, el qué dirán para actuar y hacer lo que mi corazón está pidiendo a gritos… no tengo miedo.
Cuando dejo de pensar tanto y paso a la acción movida por el impulso de la gran A… no tengo miedo.
Cuando me da igual ser tachada de… porque prefiero vivir un poquito más libre… no tengo miedo.
Cuando a pesar de las malas caras y contestaciones en el trabajo sigo yendo cada día con una sonrisa… no tengo miedo.
Cuando no dejo que sean otros los que me digan cómo he de vivir… no tengo miedo.
Cuando lo sigo intentando a pesar de “malas” experiencias… no tengo miedo.
No. No tengo miedo de llorar. No tengo miedo de saberme débil. No tengo miedo de descubrirme vulnerable. No tengo miedo… porque el orgullo nos llena de miedo… y yo lo he desterrado de mi vida.
Si la felicidad es la ausencia de miedo… creo que estoy en el buen camino.